La Sociedad Peruana de Hidrocarburos (SPH) considera positiva la operación del lote I en la costa norte del país el que producirá alrededor de 500 barriles de crudo por día, pero considera indispensable que el Gobierno gire su mirada a lo que está ocurriendo en este momento en Loreto, región que tiene la capacidad de producir al menos 42,000 barriles por día, pero ahora apenas llega a poco más del 15%.
La imposibilidad de explotar el potencial hidrocarburífero en la selva se explica por la alta conflictividad social porque las legítimas demandas de la población no han logrado ser atendidas con la eficacia y la urgencia que requieren.
El Gobierno pasado dejó aprobado un Plan de Cierre de Brechas (PCB), pero la administración gubernamental actual no ha asignado para el 2022 presupuesto a muchas de estas importantes obras que impulsarán otras actividades productivas, negocios comunales y crearán empleo. La SPH sugirió al ministerio de Economía un modelo de “mesa de destrabe” para impulsar el PCB, pero no se conoce si finalmente se adoptará alguna medida para acelerar el desarrollo de los proyectos de inversión pública para Loreto.
Mientras estos compromisos continúan sin ser cumplidos de manera suficiente para generar un impacto positivo en la economía de la región, los lotes 95 y 67 operan a su mínima capacidad y los lotes 192 y 8 se encuentran completamente parados sin que hasta la fecha se haya implementado lo necesario para que inicien sus operaciones y generen las regalías y el canon que Loreto necesita.
En el caso de Petrotal, operador del Lote 95, se pondría en riesgo la aprobación de su presupuesto de S/ 525 millones de soles para el próximo año.
Ahora mismo las barcazas con producción petrolera no pueden ser transportadas porque un grupo de personas mantienen el control del río Curaray desde hace más de 60 días sin que la Dirección General de Capitanías y Guardacostas (DICAPI) y ninguna autoridad encargada de garantizar el estado de derecho, haya asumido sus funciones para resolver esta situación.
Han pasado dos meses y aún no se designa al nuevo viceministro de Hidrocarburos y se ha cambiado al director de la Dirección General de Hidrocarburos sin que haya un reemplazo. Esta orfandad de autoridades le hace mucho daño al sector.
Frente a estos graves hechos la SPH reitera su compromiso de trabajar por el país, pero se requiere como contraparte que el gobierno tome medidas concretas en ese mismo sentido.
Hacemos un llamado a la acción urgente y eficaz para que en el 2022 logremos recuperar la paz social, se cumpla eficazmente el Plan de Cierre de Brechas y se reactive la producción petrolera y la inversión en exploración para dejar de ser un país dependiente de las exportaciones de combustibles.